Para reflexionar
Si alguna vez estuviste internado en algún lugar para tratar el problema de consumo de alcohol y otras drogas, y lo que aprendiste ahí es :
A ser un buen vendedor de artículos en la calle.
A respetar las autoridades aunque estás sean injustas.
A soportar severas disciplinas porque esta es la forma de hacer personalidades fuertes.
A esconder tus verdaderos sentimientos por miedo a que se te juzgue.
A vivir una religión llena de leyes humanas.
A dejar de ser vos mismo para transformarte en lo que ellos quieren que seas para recibir su cariño y aceptación.
A alejarte de tus seres queridos y de tus proyectos personales en nombre del cumplimiento del deber.
Si aprendiste todo esto y mucho más es porque no estuviste en un centro de rehabilitación o una comunidad terapéutica. Estuviste en un “HOGAR" Muy parecido al que saliste.
Si no aprendiste a identificar tus sentimientos para poder expresarlos a través de las palabras. A reconocer tus defectos de carácter y compartirlos en un grupo de pares que te entiendan y no te juzguen.
Si no aprendiste a mirarte en tu compañero para aprender de Vos mismo.
Si no aprendiste a comunicarte sanamente. A escuchar y ser escuchado.
Si no aprendiste a que los verdaderos problemas no están afuera tuyo, sino dentro tuyo y que no sos víctima si no protagonista de tu historia.
Si no aprendiste a relacionarte con un Dios bueno, amable, respetuoso, amoroso y papá sobre todas las cosas.
Si no aprendiste a conocerte a vos mismo para darte el valor que realmente tenés como persona. Entonces nunca estuviste en recuperación.
Date una oportunidad. Buscá una verdadera ayuda.
La adicción no es una debilidad del carácter que hay que someter con castigos para aprender.
La venta ambulante y el trabajo excesivo dentro de estas instituciones sin ninguna remuneración no es un método pedagógico ni terapéutico. Es más bien una trata de personas, trabajo esclavo encubierto y disfrazado de caridad.
Estas actividades destruyen la autoestima detienen el desarrollo personal Y lo peor de todo, generan un vaciamiento de valores y un resentimiento interno Qué vulnerabilizan aún más a la persona que padece esta terrible enfermedad de la cuál algunos inescrupulosos o ignorantes se aprovechan para beneficio económico y personal.
Buscar ayuda calificada, comprobada o profesional. Sin dudas es la mejor opción para esta y otras enfermedades y problemáticas que afectan nuestra sociedad.
Si alguna vez estuviste internado en algún lugar para tratar el problema de consumo de alcohol y otras drogas, y lo que aprendiste ahí es :
A ser un buen vendedor de artículos en la calle.
A respetar las autoridades aunque estás sean injustas.
A soportar severas disciplinas porque esta es la forma de hacer personalidades fuertes.
A esconder tus verdaderos sentimientos por miedo a que se te juzgue.
A vivir una religión llena de leyes humanas.
A dejar de ser vos mismo para transformarte en lo que ellos quieren que seas para recibir su cariño y aceptación.
A alejarte de tus seres queridos y de tus proyectos personales en nombre del cumplimiento del deber.
Si aprendiste todo esto y mucho más es porque no estuviste en un centro de rehabilitación o una comunidad terapéutica. Estuviste en un “HOGAR" Muy parecido al que saliste.
Si no aprendiste a identificar tus sentimientos para poder expresarlos a través de las palabras. A reconocer tus defectos de carácter y compartirlos en un grupo de pares que te entiendan y no te juzguen.
Si no aprendiste a mirarte en tu compañero para aprender de Vos mismo.
Si no aprendiste a comunicarte sanamente. A escuchar y ser escuchado.
Si no aprendiste a que los verdaderos problemas no están afuera tuyo, sino dentro tuyo y que no sos víctima si no protagonista de tu historia.
Si no aprendiste a relacionarte con un Dios bueno, amable, respetuoso, amoroso y papá sobre todas las cosas.
Si no aprendiste a conocerte a vos mismo para darte el valor que realmente tenés como persona. Entonces nunca estuviste en recuperación.
Date una oportunidad. Buscá una verdadera ayuda.
La adicción no es una debilidad del carácter que hay que someter con castigos para aprender.
La venta ambulante y el trabajo excesivo dentro de estas instituciones sin ninguna remuneración no es un método pedagógico ni terapéutico. Es más bien una trata de personas, trabajo esclavo encubierto y disfrazado de caridad.
Estas actividades destruyen la autoestima detienen el desarrollo personal Y lo peor de todo, generan un vaciamiento de valores y un resentimiento interno Qué vulnerabilizan aún más a la persona que padece esta terrible enfermedad de la cuál algunos inescrupulosos o ignorantes se aprovechan para beneficio económico y personal.
Buscar ayuda calificada, comprobada o profesional. Sin dudas es la mejor opción para esta y otras enfermedades y problemáticas que afectan nuestra sociedad.