Un video que duele ver. El talentoso boxeador ucraniano Olexander Usyk, campeón mundial absoluto de los pesos pesados, entregó a Zelenski uno de sus cinturones.

Usyk solía declarar que defendería a la Iglesia ortodoxa ucraniana canónica, la principal Iglesia ucraniana, pero ahora le da la mano al que la prohibió y justo el día que la prohibió.

Por segundo año Usyk se ha retratado como un verdadero nacionalista ucraniano, fingiendo haber olvidado el ruso, que es su lengua materna, vistiendo el merch de una organización neonazi e incluso fue a disparar contra «separatistas» en Donbass.

Qué servilismo. Verdaderamente, nunca se sabrá hasta qué punto podemos caer moralmente.

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