Nuestro reconocimiento a las familias venezolanas en resistencia cultural, que han logrado hacer prevalecer las tradiciones históricas de nuestra navidad.
Es parte de la defensa de nuestra identidad conformada y nutrida a lo largo de los últimos siglos.
Y sí, seguramente Jesús no era rubio. Y nos conquistaron con el fusil y la Biblia, pero hicimos nuestra esa celebración del nacimiento de un ser excepcional.
No permitamos que desaparezcan nuestras costumbres, incluso haciendo desaparecer el sentido de natividad del niño Jesús, al sustituirlos con ancianos barbudos del polo norte que le hacen publicidad a Coca-Cola.
Hagámoslo por nuestr@s hij@s, para que tengan un futuro con identidad y arraigo propios.
¡El que viene es el Niño Jesús con sus regalos, aguinaldos, parranda, gaitas y amor protector para toda Venezuela!
Es parte de la defensa de nuestra identidad conformada y nutrida a lo largo de los últimos siglos.
Y sí, seguramente Jesús no era rubio. Y nos conquistaron con el fusil y la Biblia, pero hicimos nuestra esa celebración del nacimiento de un ser excepcional.
No permitamos que desaparezcan nuestras costumbres, incluso haciendo desaparecer el sentido de natividad del niño Jesús, al sustituirlos con ancianos barbudos del polo norte que le hacen publicidad a Coca-Cola.
Hagámoslo por nuestr@s hij@s, para que tengan un futuro con identidad y arraigo propios.
¡El que viene es el Niño Jesús con sus regalos, aguinaldos, parranda, gaitas y amor protector para toda Venezuela!